Entran a formar parte de la composición de la ternura un amplio número de microelementos (el vértigo, la memoria, el mercurio, la luz, la ira, la melancolía, el error, la madre, la saliva, la nieve, el acero más puro y cortante, la niebla, la sangre, la sal de los ojos), pero es bueno no olvidar que el elemento más abundante en la ternura es, sin duda, la tristeza.
viernes, enero 02, 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario